Llevo un tiempo pescando solo. Bueno últimamente me acompañan mi gran amigo “el pala” o Adrian que están empezando en esto y a quienes estoy encantado de enseñar lo poco que sé.
Yo ya sabéis que tengo a Bily como primer maestro en este deporte (bueno, después de mi padre, mi Capitan preferido) y que son claves los referentes para poder llevar una evolución adecuada.
Hablando de eso, este fin de semana, Bily me presentó a Fernando, conocido en la red por “Fersub”, un gran tipo de esos que sin quererlo, desde la humildad y con los hechos, te demuestra que te queda mucho, muchísimo en este deporte y que es eso lo que lo convierte en apasionante.
Fernando, compañero de pesca desde bien jóvenes de Bily, lleva la pesca y el mar en la sangre, es mecánico naval y una auténtico figura bajo el agua. Como os he dicho lleva mucho en esto, se sabe todo sobre técnicas, materiales y trucos, ha vivido en Mallorca y se ha esculpido junto a los grandes, ha competido, y ha defendido en diferentes plazas los intereses de este noble deporte, tan maltratado a menudo y sobre todo, tan desconocido.
El domingo, salimos a pescar, Fernando, Billy y un servidor. Salimos en la barca de Fernando, una rígida, de unos cuatros metros y medio a la que el mismo, y para mi asombro, le ha construido una patronera con despojos de otros barcos. La barca, reunía detalles para pesca submarina de esos que inspiran orden, admiración y años de experiencia.
Quedamos en San Pedro del Pinatar, a las 8 a.m. Fernando, embuchado en su traje chicle(hecho a medida), nos esperaba ya en la barca.
Estuvimos pescando sobre todo en los Tabares. Son una barras de piedra de diferentes tamaños,muy largas y que se extienden en paralelo durante más de dos millas a diferente profundidad. Una a unos 5m, otra a unos 9m y otra a unos 15m. Nosotros estuvimos a poco agua, salvo al final que subimos un poco hasta los 15-18.
La pesca en esta zona es sobre todo para los que dominan el agujero, y en eso, Billy y Fernando son dos hachas. Lo mió es más la espera, así que os imagináis que no fui quien más triunfó, eso si, algún sargo gordo calló.
El que tuvo mejor jornada fue Fernando, que se marcó un par de sargos breados de 1 Kg uno y 3 kg el otro, algún sargo y dos doradas una de ellas de Kilo. (No había visto nunca un Breado tan grande….)(¡Fernando, el Sargo estaba de coña a la brasita...!)
Bueno, la verdad es que aprendí mucho de este tipo de técnica, “al agujero” que requiere rapidez, sigilo, picardía y técnica.
Espero poder salir a pescar a más a menudo con estos dos maestros.
Bueno, por delante vaya mi gratitud a los dos por compartir tan generosamente lo que sabéis. Fernando, un placer. Nos vemos en el azul.!!!
